#109

Debe ser que no hay colisión, ni ley, ni gravedad que les pueda hacer caer aunque tiren a dar. Aunque a estas alturas, pocos son los críticos que se atreven a lanzar dardos contra una de las bandas más importantes del panorama nacional. Cabezas de cartel durante el pasado año en la mayor parte de los festivales; se han recorrido la Península de Norte a Sur y de Este a Oeste; han sido y son reclamados al otro lado del charco... No hay duda que Vetusta Morla han sabido hacer bien las cosas. Han creído en ellos, y al final han hecho que los demás crean en ellos.

Vetusta Morla @ Festival Cruzcampus.
Sevilla. 28 Octubre 2011.

 ¿Quién no ha salido tarareando de alguno de sus conciertos ese famoso "la lalalala la lalalala" que vertebra la canción de "Saharabbey Road"? ¿A quién no se le ha encogido un poco el estómago con la voz de Pucho? ¿Quién no se ha dejado la voz en alguno de esos karaokes que generan canciones como "Valiente" o "Copenhague"?

Son un fenómeno. Y no uso este término como un adjetivo, sino como un sustantivo. Musical, social... Qué más da. Son un fenómeno sin más. Nadie se quiso perder la oportunidad de verlos en una de las salas más míticas de la capital, La Riviera. Cinco noches o cinco oportunidades para demostrar por qué todos hablan de ellos. Porque todo el mundo habla de ellos. 

Me voy a permitir el lujo de hablar en primera persona como muchas veces hago aquí, porque ni estoy pretendiendo hacer una crítica, ni una crónica, ni un estudio de caso. Simplemente es una manera de homenajear a un grupo de músicos que admiro. Y lo digo desde el corazón. Los admiro por haber conseguido lo que han conseguido, y me alegro por ellos (aunque a veces me resulte horrible estar en primera fila con mujeres al borde de un ataque de nervios a mi alrededor con ganas de lanzarle el sujetador a Pucho) . Y me alegro de haber llorado con Copenhague hace cuatro años, porque el que me siga removiendo las tripas por dentro cada vez que suenan los primeros acordes (creo que los reconocería aunque en ese mismo momento cayera una bomba a pocos metros) me hace saber que no son un boom pasajero (y si lo son para esas mujeres al borde de un ataque de nervios, no me preocupa), no son un grupo cualquiera para mi. No sé, no voy a caer en los tópicos de que han marcado una parte importante de mi vida y "blablabla", es que a estas alturas no concibo mi iPod sin "Otro día en el mundo" y sin "Mapas" y mi estantería sin los CD en formato físico. Y que con sólo dos discos de estudio estén a ese nivel, merece reverencia; aunque sin olvidar los años de trabajo que ahí detrás de todo esto.

Ayer tuve la suerte, el privilegio o la simple oportunidad de verlos en un formato íntimo. En colaboración con la Comunidad Sant'Egido y con la presencia de otros artistas como Pablo Rubén Maldonado, "Del Tirón", "El cobo" o Chaleco; en el pequeño (a la vez que enorme por no abandonar una causa que siempre está ahí) Festival Benéfico "África Une". Para mí fue un placer más allá de lo cerca que pude estar de ellos o no... Fue un placer escuchar "En el río" tan desnuda, tan frágil, tan... Un placer hacer karaoke en "Valiente", y cerrar los ojos en "Maldita dulzura" que siempre duele, y siempre tiene nombre propio. Un placer obligarlos a hacer un Bis(-illo) (aunque todo el público quisiera una cortina) y un placer en definitiva que hayan sido mi primer concierto de este nuevo año.
Fui de ese grupo de personas que se quedó en casa cinco noches y no pisó La Riviera en Diciembre. Pero no me preocupa. He tenido bastantes oportunidades de verlos en directo en estos años y creo firmemente que tienen el mejor directo del país. Sí, es completamente cierto que en cuanto se traspasa la barrera de la tercera a la primera persona, es imposible ser objetiva.
Es que Vetusta Morla es una historia aparte. Juegan en otra liga. Y lo que más me importa en estos momentos es que siga escribiendo sobre ellos durante giras y giras. Que pueda seguir guardando momentos en mi cámara de ellos seis sobre el escenario.
¿Quién no se ha estremecido cuando golpean los bidones en "La cuadratura del círculo" y cuando Pucho nos desgarra con un "¡Tómalo, tómalo!" en "El Hombre del Saco"?